Pasan los años y nos hacemos mayores, pero siempre se plantan ante nosotros nuevos retos con nuevas oportunidades y si hablamos de interiorismo y diseño, una habitación para niños, es el mejor lugar para desatar nuestra creatividad.
Una creativa casa con objetos y mobiliario de distintas eras combinados para crear marcados contrastes. Esta peculiar casa en Dinamarca, es un claro ejemplo de la creación de contrastes, no hay ni un solo detalle dejado al azar. Sus elementos, seleccionados minuciosamente, se mueven dentro de un rango de colores tales como negro, gris, marrón y blanco que se combinan con pequeños destellos de morado y amarillo.
Este fantástico loft en Barcelona, combina a la perfección el diseño clásico de su mobiliario con elementos modernos y de decoración curiosa. Se trata de un apartamento diseñado por el equipo de Recdi8 Studio que dota de un aire a museo renacentista un piso en pleno eixample.
Este apartamento de estilo urbano, ‘urban style’, se encuentra en el barrio de TriBeCa, Nueva York. Reformado por los mismos inquilinos han conseguido crear un hogar único con un estilo muy marcado, utilizando una paleta cálida y bastante neutra combinada con elementos de estilo moderno-ecléptico.
Cuando queremos decorar nuestras paredes, nos asaltan muchas dudas. Las más comunes son la cantidad de objetos que se pueden colgar en una pared o el tamaño de estos, romper con el estilo de la decoración para crear contrastes o seguir una misma linea, colgar fotos, cuadros o algo más atrevido e innovador.
Si bien muchas veces se dice que la cocina es el corazón latente de cualquier casa, la sala de estar y el comedor pueden ser el centro social, donde las visitas se juntan, la familia se relaja y incluso donde muchas veces se acaba el trabajo que uno se llevó a casa. Pero a veces es complicado marcar una clara separación entre el salón y el comedor.
Siempre cuando llega el frío, el espacio que nos gustaría que fuera más acogedor, es nuestro hogar. A veces nos vienen a la cabeza pensamientos sobre culturas nórdicas, que conviven con gélidos inviernos y en estas culturas encontramos un estilo de interiorismo muy interesante, el diseño nórdico.
Siempre es un reto remodelar un hotel, pero si hay que hacerlo en pleno centro de Florencia, ese reto se convierte en un auténtico desafío. Este hotel utiliza toques de la cultura clásica itliana combinados con el diseño moderno y minimalista. La parte exterior del edificio queda definida por grandes losas de piedra y las ventanas de arco simétrico de su fachada principal.
